Capítulo 1

Narra Lucía.

 

-Vamos, Lucía, que llegamos tarde y ya sabes que Liliana y María se desesperan.
-¡Espera, Paula! ¡No tengo ropa! -Digo rebuscando en el armario.
-¡Pero si lo tienes lleno de ropa! -Grita Paula mientras se acerca.

Pau me aparta del armario y empieza a rebuscar en él. Me cruzo de brazos mientras la miro y veo cómo empieza a sacar ropa como una loca.

-¿Qué hac..?
-Toma, ponte esto, pero no tardes mucho, que ya son y media. -Me corta alzando la mano con una camiseta y unos vaqueros.
-Tranquila, que de aquí a Callao tardamos diez minutos en llegar.

Cojo la ropa y me meto en el baño. En diez minutos estoy lista y salgo mientras me echo colonia.

-¿Ya? -Me pregunta ella.
-Sí, ya estoy. -Digo mientras le hago una señal para que salga de la habitación.

Nos reunimos en Callao con Lili y María. Empezamos a caminar y a charlar entre nosotras. Entramos en algunas tiendas, tenemos que comprar todo lo necesario para que mi fiesta de cumpleaños del sábado sea perfecta.
Vamos por una calle cargadas de bolsas cuando me llega un WhatsApp.

-María, sujeta esto un momento... -Le paso las dos bolsas que llevo en la mano derecha.

Saco el móvil y lo miro como puedo. Es de mi primo. Lo abro y lo leo. Miro a Paula y empiezo a leer en voz alta.

-"¿Estás sentada? ¡Tengo entradas para ver a Pablo Alborán en concierto el 11 de Octubre! Cuatro, para que lleves a tus amigas".

Paula y Lili me miran boquiabiertas. Yo las miro y sonrío. Lili empieza a gritar como una loca y Paula no para de decir que no se lo cree.

-Pero bajad la voz, locas, que la gente nos mira mal. -Dice María mirando hacia un lado.
-Lucy, ¿quién te lo ha dicho?  -Me pregunta Paula.
-Mi primo. -Sonrío.
-¿Ismael? -Pregunta María con poco interés.
-Sí. -Asiento y miro hacia el móvil.
-Amo a tu primo, tía. -Me dice mientras cojo las bolsas de nuevo.

Empezamos a caminar después de calmarnos un poco. Aunque Lili sigue en su mundo.

-Pero imagina, las cuatro, concierto de Pablo.. ¡La perfección existe! -Grita.
-Baja la voz ya, Lili, que estás en la ciudad, no en el campo. -Dice María casi en un susurro.
-Vale vale.. -La imita.- Pero es que es alucinante..
-Cálmate ya.. -Le digo.- Oye, allí hay una tienda de decorados.
-Sí, nos faltan las velas.
-¿Le vais a poner velas a la tarta? -Pregunto extrañada. Ellas se empiezan a reír y me dirigen hacia la tienda.
-No, tonta. Velas para decorar.

Nada más entrar me da el olor a velas aromadas. Las chicas se separan y nos quedamos cada una en un lado de la tienda.
Yo me quedo en la entrada.
Miro las tiras con palabras e incluso frases para decorar el techo.
Pasan tres minutos hasta que viene María.

-¿Alguna te gusta? -Me pregunta cogiendo una.
-No, no mucho. -Suelto la que tengo en las manos.
-Son feillas. -Ríe.

Lili y Paula vuelven con varias velas en las manos y globos. Nos acercamos al mostrador.

-Hemos cogido velas aromadas y globos de varias formas y colores.
-Va a parecer una fiesta de niñas de 12 años. -Bromeo.
-Eso al principio... -Paula me guiña el ojo.

Pagamos y salimos de la tienda. Seguimos caminando mientras hablamos.

-Entradas agotadas en Barcelona. -Nos dice Lili mirando su móvil.
-¿Ya? -Preguntamos Paula y yo sorprendidas.
-Sí. -Sonríe.- Uf y nosotras tenemos entradas...
-Ya empezamos... -Murmura María.
-Déjala en su mundo. -Río.

Noto la mano de Paula en el brazo agarrándome. Se ha parado en seco. La miro y la veo extrañada, mirando hacia un punto fijo.

-¿Qué pasa, Pau? -Pregunto arqueando una ceja y María y Lili se paran unos centímetros más delante.
-¿No lo oís? -Nos miramos entre nosotras.
-¿El qué?
-Parece una guitarra.. ¿No os suena la melodía?

Hago como Paula y miro a un punto fijo para centrarme. Sí, se oye el sonido de una guitarra.

-Parece... -Empieza Lili.
-Sí, parece él. -Sigue Paula.
-¿Quién? -Pregunta María.
-Pablo. -Digo sorprendida.